Esta semana queremos dedicar nuestro post al Cementerio de Begoña, en Bilbao. Muchos ni siquiera sabrán que existe o que al lado hubo otro, el Cementerio civil de Mallona, del que hoy solo se conservan la puerta principal, un par de panteones y la base de lo que en su día fue el monumento conmemorativo a los defensores de los Sitios de Bilbao.
Pronto pasará lo mismo con el de Begoña, cuyo proceso de clausura se inició en el año 2006 con la suspensión de los enterramientos. Son unas dos mil las fosas del camposanto. La más antigua data de 1893 y aproximadamente el 75% de las concesiones ya han vencido. A las que aún siguen en vigor se les ofrece el traslado al Cementerio de Derio y aquellos restos que no sean reclamados serán llevados al osario. Este año será el último para visitarlo, solamente domingos y festivos en horario de mañana, porque quieren convertirlo en zona verde.
Nosotras, como defensoras de los cementerios, no podemos dejar de sentir lástima por la pérdida de este lugar artístico y de memoria, y delante de esas tumbas preguntarnos por las historias que esconden y que dentro de poco se perderán para siempre…
Fotos de Conchita Mencia.