Tu boda en un pueblo medieval

· 1 octubre, 2020 · 1:34 pm

Con este mono de bodas que tenemos en Panateneas no paran de surgirnos nuevas ideas. Esta vez, para los amantes del arte y la arquitectura medieval, os traemos una lista con –a nuestro parecer– los diez pueblos medievales más bonitos del norte de España. Escenarios de película para sesiones de fotos, ceremonias o incluso bodas temáticas al más puro estilo Robin Hood o Camelot.

Hace unos años ya colgamos en nuestras redes sociales una foto del Castillo de Olite, en Navarra, porque nos parecía un lugar precioso para una ceremonia de boda. Olite fue la capital del Reino de Navarra y su Palacio Real (o Castillo) uno de los más lujosos y hermosos de Europa.

Olite – Foto de Sergio Otoya para Unsplash

En la provincia de Huesca se encuentra la villa medieval de Aínsa. Fue declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1965 y todo aquí es digno de mención: sus antiguas calles, su enorme plaza mayor, el castillo, las murallas, las puertas, etc. Esta ciudad transmite a otra época, y me recuerda un poco a Monteriggioni, en la Toscana italiana. Una sesión de fotos de boda ahí tiene que ser preciosa…

Aínsa – Foto de la web Los pueblos más bonitos de España

En Girona hay dos pueblos medievales irresistibles de nombrar. El primero es Besalú, en la comarca de La Garrotxa. Un pueblo de esos de película que desprende aire medieval ya antes de cruzar el puente. Además de diferentes iglesias románicas destaca la judería, en especial el Miqvé (casa de baños judía). Y como no, el majestuoso puente románico sobre el río Fluvià.

Besalú – Foto de Error 420 para Unsplash

El segundo pueblo es Pals, en el Baix Empordà. Desde lejos ya se presume la silueta de su muralla y sus torres visigóticas, como la de las Horas. Y ya dentro, ese color ocre de fachadas y adoquines. Todo rematado con una preciosa vista panorámica de las dunas y los campos de arroz.

Pals – Foto de Laurens Kroon para Unsplash

Cambiando un poco de tercio, lo que se divisa desde lo alto de la Villa de Laguardia, al sur de Álava (País Vasco), no son campos de arroz si no vides. Y en el interior de las murallas un trazado medieval que se conserva prácticamente intacto. A parte de sus iglesias, entre las que sobresale Santa María de los Reyes, o la Casa de la Primicia, son destacables los calados o cuevas que tienen todas las casas. Una boda en este pueblo no deja indiferente a ningún invitado (os lo digo yo que lo he vivido).

Laguardia – Foto de la web Los pueblos más bonitos de España

Y muy cerquita pero al otro lado del Ebro, ya en La Rioja, está Briones. El sabor medieval que desprende este municipio se percibe en el trazado de sus ventanas, en las hornacinas, en sus escudos… Algunos edificios apenas se conservan en pie, con restos como la Torre del Homenaje del antiguo Castillo, o dos de las seis puertas originales de la muralla. Y después de callejear (aunque no es muy medieval) no podéis dejar de hacer una visita al Museo del Vino de la Bodega Vivanco.

Briones – Foto de Cristina Roldán

Seguimos bajando hasta la provincia de Soria para adentrarnos en Calatañazor, un auténtico viaje al pasado. Las casas de barro y paja son una muestra maravillosa de la arquitectura popular medieval. Y la portada románica de Santa María del Castillo un fiel reflejo del románico castellano. Como peculiaridad, desde lo alto de la muralla o de los restos del Castillo se observan las chimeneas cónicas hechas de teja típicas de este pueblo. Como decía, un pueblo donde el tiempo se paró para dejarnos maravillosas estampas.

Calatañazor – Foto de Henar Lanchas para Unsplash

También en Castilla y León, en la provincia de Burgos, destaca Frías con sus casas de toba y madera colgadas sobre la roca. El puente románico sobre el río Ebro, el Castillo del siglo X y el antiguo lavadero municipal conforman la imagen de postal de esta pequeña localidad medieval.

Frías – Foto de Alejandro Bergado

Santillana del Mar, en Cantabria, se desarrolló en torno a la Colegiata de Santa Juliana en el siglo XII. Y aunque el arte renacentista y barroco también están muy presentes en las calles de esta villa, su trazado en forma de Y, sus torres militares y algunas Casonas aún evocan ese pasado medieval.

Santillana del Mar – Foto de la web Los pueblos más bonitos de España

Y terminamos este tour medieval con Hondarribia, en el noreste de Gipuzkoa, muy cerca de la frontera con Francia. Esa característica fronteriza se une a su idiosincrasia marinera en un casco histórico peculiar: rodeado de una muralla con sus baluartes aún en pie, con angostas calles adoquinadas y casitas de colores al más puro estilo vascofrancés. Destaca la iglesia gótica de Santa María de la Asunción y del Manzano y el famoso parador de origen medieval conocido como Castillo de Carlos V. Fuera de la muralla uno no puede perderse el barrio de la Marina, emblema de la ciudad.

Hondarribia – Foto de la web Hondarribia Turismo

Y hasta aquí nuestra selección de pueblos medievales dignos de visitar, de sesión de fotos o de conservar en nuestras retinas. ¿Con cuál os quedáis?