Playa del Carmen, la isla de Cozumel o Akumal y sus tortugas son lugares imprescindibles que visitar durante una fantástica luna de miel en la Riviera Maya. Pero hoy os proponemos un paso más. Una ruta por la misteriosa civilización maya a lo largo de México, Belice y Guatemala.
Chichén Itzá, en la península del Yucatán, es el punto de partida de este viaje. El Templo de Kukulcán, la famosa pirámide escalonada que todos conocemos, ha sido reconocida como una de las nuevas siete maravillas del mundo moderno. Durante los equinocios, el juego de luces y sombras provoca un efecto óptico por el que se aprecia a la serpiente bajando por los escalones, un espectáculo magnífico que nos brinda la naturaleza. Tampoco hay que perderse el Observatorio, el Templo de los Guerreros o el Juego de Pelota.
Si continuamos hacia la costa caribeña nos encontramos con las ruinas de Tulum sobre una preciosa playa de arena blanca. Ya en Belice, Altun Ha fue un importante enclave comercial y ceremonial del periodo clásico. Y no podemos irnos sin visitar las ruinas de Caracol; ubicadas en plena selva beliceña fueron consideradas el centro político más importante de la época.
Desde allí nos adentramos en Guatemala. Las majestuosas ruinas de Tikal son Patrimonio de la Humanidad, y no es para menos. Resulta sobrecogedor pasear por este asentamiento a medio explorar. Al sur del país, la ciudad colonial de Antigua, el lago Atitlán y los pueblos indígenas que le rodean son puntos imprescindibles en esta ruta. Y los que aún quieran más pueden continuar viendo tesoros arqueológicos por El Salvador y Honduras. Los que no, volver a la Riviera a través de la selva de Palenque sin dejar de visitar Campeche o la legendaria Uxmal.
Restos arqueológicos mayas y frondosas selvas se mezclan en esta ruta con históricas ciudades coloniales y playas fabulosas. ¡Un viaje espectacular para aventureras como nosotras!